RISAS EN EL PARQUE

En el parque me río porque todo es muy gracioso. Los árboles son graciosos, los otros niños son graciosos, los padres de los otros niños son también graciosísimos. En mi casa me río porque ese que asegura ser mi padre es un payaso y me hace mucha gracia. Y mi madre es muy graciosa también. Los momentos en los que grito, que cada vez son menos, son porque no me hacen caso o porque no me dan de comer o creen que con lo que me dan (cuatrocientos gramos de verduras y un yogur) es suficiente. Lo de dormir lo dejo nada más para las noches. Estos dos insisten en que tengo que dormir una siesta. Y sí, claro que duermo. Casi mil segundos seguidos. Seguro que, cuando sea más mayor, si duermo la siesta me llaman "dormilón" o cosas peores.
Pero de momento... risa. Es divertido reirse. Aunque salgan muchas arrugas en la cara.
1 comentario
mariana -
sebastian, eres precioso con arrugas o sin ellas...
la risa es el alimento del alma, no solo para ti, sino que creo que tambien para tus papis